EL CUERVO
(Versión libre)
Por Edgar Nevermore Poe
Frío diciembre, noche triste y nada más…
¡Oh, Leonora, mi Leonora, nunca más!..
Tocan suave a la puerta; corro las cortinas. Sombras nada más...
Sigo leyendo; golpean en la ventana. Algo negro y nada más…
El cuervo entra. Se posa sobre un busto y nada más…
Le digo: Perdí amores. ¿Y esperanzas? Nunca más…
El avechucho responde: Nunca más…
¿Será el eco o sólo aprendió a decir nunca más?…
No. ¡Oh, señor: A Leonora olvidarás!...
¿Existe algún bálsamo? Pregunto nada más…
Vete, abandona ese busto y déjame en paz…
El no se mueve. Calla y responde: Nunca más…
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